La
menopausia puede ser una etapa difícil
en la vida de la mujer, pues marca un periodo de transición caracterizado por
la finalización de los ciclos menstruales, lo cual provoca el desarrollo de un
amplio abanico de síntomas.
Se considera que una mujer ha alcanzado la menopausia cuando transcurren 12
meses sin tener un periodo menstrual. Se puede presentar entre los 40 y 50
años, pero la edad promedio en México es a los 51 años.
La menopausia se puede acompañar de síntomas como
bochornos,
resequedad
vaginal y
cambios emocionales que pueden afectar la
calidad del sueño, producir cansancio y afectar la salud emocional, la calidad
de vida y las relaciones personales.
Estos se pueden experimentar en los años previos y posteriores a la menopausia
por lo que resulta ideal tratarlos. Existe una gran variedad de tratamientos
para mejorar los síntomas, desde los cambios en el estilo de vida, hasta la
terapia de reemplazo hormonal.
La
osteoporosis es una consecuencia de la menopausia al
perderse la protección que ofrecen las hormonas al hueso y, por lo tanto,
disminuyendo la calidad del mismo, haciéndolo más propenso a fracturas. Existen
varias opciones de tratamiento para la osteoporosis que van desde tabletas,
hasta tratamientos intravenosos que se aplican 1 a 2 veces al año.